Tegucigalpa, Honduras (Conexihon).- Una ola de indignación han causado los actos de detención, tortura y salvajismo en contra de estudiantes y defensores de derechos humanos en la Universidad Nacional

Autónoma de Honduras (UNAH). La acción represiva de este viernes culminó con 16 detenidos y una persona desaparecida.

Con graves afectaciones respiratorias producto de la inhalación de gases pimienta lanzados directamente a sus rostros resultaron los estudiantes: Cristian Sanabria, Edwin Salas, Bryan Gonzales, Santos Ruíz, Andy Villanueva, Marcio Silva y Nahum Portillo quienes fueron detenidos y acusados por los delitos de atentado y desobediencia.

DPI
Los jóvenes con órdenes de captura fueron trasladados al Core 7.

En la misma acción policial los defensores: Carlos del Cid, del Observatorio Ecuménico de Derechos Humanos (OEIDH), Tomy Morales de la Asociación por la Democracia y los Derechos Humanos (Asoprodehu), Hedme Castro de ACI-Participa y Ariel Díaz de la Asociación de Jóvenes por los Derechos Humanos (AJDH), fueron detenidos y remolcados en una grúa policial a las instalaciones de la Dirección de Investigación Policial (DPI) .

La acción ocurrió en horas de la tarde cuando elementos de la Policía Nacional rompiendo la reglamentación internacional sobre el uso de la fuerza, intercepta un microbus del Comisionado Nacional de Derechos Humanos (CONADEH) en el que se trasladaba el grupo.

El ombusman, Roberto Cáceres Herrera, confirmó que desde la madrugada se empezó a dar seguimiento a las detenciones para verificar el debido proceso y que en horas de la tarde se acompañó a las organizaciones de derechos humanos.

Bus
La Policía forzó la salida de los defensores y estudiantes lanzando gas pimienta en sus rostros.

“Entramos con ellos junto a dos representantes del CONADEH en un bus de nuestra institución y ese bus estaba ahí cuando salieron los defensores que se encontraban dentro de la Universidad con estudiantes y al estar nuestro bus enfrente se introdujeron en el mismo. Pedimos a las autoridades que no tomaran ninguna decisión, -ya que- ellos querían inmediatamente detenerlos, pero nosotros no verificamos las órdenes que tenían (…) No íbamos a avanzar si la Policía nos demostraba que había una orden de detención, de todas maneras el bus fue traslado a -la estación policial- Core 7 (…) Ha habido uso excesivo de la fuerza que es censurable en estas situaciones”, expresó Cáceres Herrera.

El grupo pretendía salir de los predios de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) tras realizarse un desalojo violento en horas de la mañana.

En comunicación con medios de comunicación nacionales Ariel Díaz aseguró que varios de los detenidos presentan severas complicaciones respiratorias y no habían sido atendidos por médicos. 

“La Policía Nacional lanzó gas dentro del microbus, a pesar que nos resistimos a abrirlo, nos echaron en la cara, los jóvenes estudiantes también están procesados”, narró.

Defensores
Defensores de derechos humanos Carlos del Cid y Tomy Morales afectados por los efectos del gas pimienta.

De su lado, la coordinadora del Comité de Familiares Desaparecidos de Honduras (COFADEH), Berta Oliva, confirmó en horas de la noche que la Policía Nacional presentó su informe a la Fiscalía en donde se les acusa (al segundo grupo) por los delitos de atentado y desobediencia, mientras que “Hedme fue dejada en libertad”.

Defensor desaparecido

El Comité por la Libre Expresión (C-Libre) ha confirmado que hasta eso de las 10:00 de la noche el periodista y defensor de derechos humanos, Darwin Steven Carías Álvarez, permanecía desaparecido, luego haberse presentado a la Universidad.

Carías Álvarez trabaja con el Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de las Víctimas de la Tortura y sus familias (CPTRT) haciendo labores de defensoría. 

También en horas de la mañana el equipo técnico de C-Libre ha interpuesto habeas corpus para garantizar la vida de los jóvenes afectados.

Detención irregular, sin orden de captura

En los videos que fueron rápidamente divulgados por organizaciones de derechos humanos y estudiantes se observa que pese a que el grupo sale del vehículo de forma pacífica, los oficiales se negaron a cumplir con el protocolo de prácticas sobre el uso de la fuerza. Los defensores y estudiantes no se sobreponían de los gases, en medio de gritos de dolor, se les impidió limpiarse los ojos y les esposaron.

“Soy diabético por favor, soy diabético, déjenme echarme agua en los ojos”, gritaba uno de los afectados, mientras uno a uno fueron subidos a la patrulla y llevados posteriormente a la Dirección de Investigación Policial (DPI) en la colonia Kennedy de Tegucigalpa. 

A eso de las 3:30 de la tarde, en las afueras de la UNAH, Wilfredo Méndez, director del Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos (CIPRODEH), solicitaba información de los defensores y estudiantes, pero se le impidió su ingreso.

“Estamos aquí porque han defensores detenidos y queremos saber cómo están”, expresó Méndez, mientras un par de agentes aseguraban que “está prohibido el acceso a cualquiera en este momento”.

Méndez dijo que este tipo de acciones son una vergüenza para todo el proceso de reforma universitaria y para el proceso de avance en la academia. Es una forma terrible de conclusión de un mandato que pudo haber hecho mucho pero que al final le hizo mucho daño a la UNAH.

MP Juntas
El Ministerio Público envía a evaluación a jóvenes estudiantes detenidos tras sufrir traumatismos.

Cinco estudiantes más detenidos en el desalojo 

En horas de la mañana un basto operativo de al menos 500 cuerpos de seguridad del Estado conformados por la Policía Militar y Nacional se presentaron a cumplir la orden del juez ejecutor, para desalojar abruptamente a estudiantes, que permanecen en lucha dentro del campus universitario. 

Los jóvenes detenidos son: Sandra Suseth Vásquez Hernández (25), Pablo Raúl Rojas Madrid (20), Yunior Alexander Oyuela (20), Erick Geovany Gómez Andino (26), Erick Josué García Osorto (24), todos ellos acusados por el delito de usurpación.

Entre tanto, el Movimiento Estudiantil Universitario (MEU) convocó a una conferencia de prensa frente a las instalaciones del Core 7, se ordenó un bloqueo en las calles con el fin de que no hubiese asistencia legal, sin embargo, gracias a la presión de los medios de comunicación y de cuerpos de defensores de derechos humanos, logro el desbloqueo de las calles.

En declaraciones a la prensa representantes del MEU condenaron la acción. “Ayer soltamos los centros regionales y hoy nos responden criminalizando a 16 estudiantes más”. 

Los jóvenes exigieron la pronta instalación de una Comisión de Seguimiento del Decreto aprobado por el Congreso Nacional y llamaron al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para la construir el reglamento electoral estudiantil.